Hoy la noticia es que el macabro juego de la ballena azul se cobró su primera víctima fatal en Argentina.
Noticias impactantes como estas, lógicamente alarman a los padres y a las autoridades. En los últimos meses se estuvo hablando en los medios y en las instituciones de cómo prevenirnos de este juego perverso del que ya hubo varios casos en nuestro país y uno con desenlace fatal. Incluso circuló un documento emitido por el Ministerio Público Fiscal para alertar a los padres desprevenidos y aconsejarles medidas a tomar.
Ciertamente lamentamos la perdida de esta vida y creemos pertinente tanto la preocupación de los padres y las autoridades como las medidas preventivas que se tomen. Pero nada se dice de los otros 900 adolescentes que mueren cada año a causa de suicidio en Argentina.
El juego de la ballena azul termina siendo el emergente de un problema mucho más profundo que es el suicidio adolescente. Tal vez debiéramos aprovechar la visibilidad mediática que da el juego de la ballena azul para que todos los padres tomemos consciencia del riesgo al que se exponen nuestros hijos y de la necesidad de estar informados sobre cómo prevenirlo.
La prevención del suicidio debe comenzar desde la primera infancia brindando a nuestros hijos un entorno familiar donde se sientan queridos, respetados, valorados y aceptados tal y cómo son, donde se confíe en ellos y en sus capacidades, para que se conviertan en adolescentes que a su vez se quieran, se respeten, se valoren y confíen en ellos mismos.
El juego de la ballena azul es solo una amenaza más que encuentra en nuestro país, como en tantos otros, adolescentes vulnerables sin los recursos necesarios para enfrentar el verdadero desafío que es no prestarse ni a ese ni a ningún juego.
Espero que la muerte de ese chico sirva para que los padres tomemos consciencia de la necesidad de ocuparnos del tema, por él, por su familia y por los cientos de chicos que mueren año tras año a causa de suicidio dejando familias destrozadas sin poder entender.
Todos somos responsables. El suicidio no es una cuestión de unos pocos o de algunos, es una cuestión de todos.
Para más información sobre prevención del suicidio en adolescentes puede leer nuestros apartados.
Las opiniones vertidas en estas notas no necesariamente reflejan posturas oficiales del Centro de Asistencia al Suicida y se publican bajo exclusiva responsabilidad de sus autores.